Se oye un rítmico puf puf de fantasmas paridos desde el otro
lado de la ciento sesenta y seis. Y ya van tres. Los inspira-respira, como
siempre, no suelen dar resultado en el cese del sofoco despavorido que nos
provoca a ambos pensar que la situación se puede volver a repetir: Ilusión,
espera neurótica y un desenlace colmado de lágrimas agarrotadas. Pero yo siempre
tengo la misma esperanza: Que sea niña, por favor.
4 comentarios:
¿Por qué te americanizas? En mi pueblo las calles tienen nombre de persona o de cura incluso...
Por lo demás, muy bueno como siempre. ¡Un saludo!
Querido amigo!!!! No sabes cuánto me alegro de verte por aquí!!!!!!! Mil gracias por leer mis textos y por tus comentarios, de corazón.
¿Me estoy americanizando? jajajaja... Bueno he de decirte que la ciento sesenta y seis es una puerta, el número de una puerta de hospital ;)
Gracias por pasarte por las nubes!!!!!!! Un besaco!!!!!!!!
Hola, es posible que ya te haya llegado la convocatoria, pero por si acaso.
Te invito a participar en DESPOJOS del REC.
Ya somos más de medio centenar los participantes que hemos dado una segunda oportunidad a los microrrelatos que enviamos al concurso.
Te dejo enlace al blog donde encontrarás toda la información para participar.
Un saludo.
http://espiralesdetinta.blogspot.com.es/2012/12/61-cuenta-atras.html
Hola! muchas gracias por la invitación! No sabía nada de esa iniciativa. Muchas gracias por avisar. Echaré un vistazo a ver cómo va.
Un abrazonube!!
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